lunes, 30 de mayo de 2011

La pérdida del humanismo

No me considero un empirista constatado ni un defensor acerrimo de Hume ni de las posiciones filosófica (al contrario que de las económicas) de Adam Smith y su humanismo escocés pero creo que es necesario realizar una reflexión a causa de la desestructuración del stock de conocimiento de la sociedad.

Se ha perdido la noción del hombre como causa y motor del progreso y junto a ella se ha perdido la noción del polímata renacentista ducho en diferentes disciplinas las cuales dominaba para su cohesión y orgullo. Es el prototipo de genio universal, del cual despues de Leibniz se considera su extinción aun teniendo algunos exponentes en Von Neumann e Isaac Asimov o incluso en menor medida en algún español como el propio Eduard Punset. Esto es debido en parte al propio Adam Smith y su noción de especialización, que cierra la distintas areas del conocimiento impidiendo su interconexión y provocando las críticas interdisciplinares entre distintos profesionales y el fracaso de los equipos multidisciplinares que se establecen como metodo de investigación.

Aristóteles lo dijo "el hombre tiene avidez de saber" y es totalmente cierto pero hoy en dia se toma ese saber como un metodo profesional no como un beneficio en si, no se constata la dación de bienestar y libertad del saber pues la erudición es eclipsada por la ignorancia del populacho demócrata en pro de la "igualda", pero la igualdad citando a Marx no es ser todos iguales, es tener todos las mismas oportunidades dandose a cada uno según su capacidad y su necesidad (no quisiera ser yo el que obstruyese a Smith en favor de Marx en un momento como este).

Ningún tipo de profesional necesita los profusos descansos ni sufre de depresión cuando ama su entorno de trabajo, como prueba me remito al prototipo de hombre renacentista, Leonardo Da Vinci que pintaba durante horas olvidandose de comer y dormir. Sin embargo el mediocre atrapado en su propia limitación necesitará de al menos un periodo de descanso igual al de trabajo para compensar su malestar y este tipo de sensaciones provocan el tan agravado absentismo laboral que profusa en nuestro sistema productivo.

Pero volviendo a la multidisciplinariedad volvamos a otro gran genio, Erwin Schrödinger el cual escribió como padrino de la mecánica cuántica sobre saltos cuánticos en el genoma humano en su libro "¿Que es la vida?" sin tener conocimientos profundos de biología pero con una gran pasión por el simple hecho de saber sin querer ningún tipo de medraje profesional y recitaba, que la multidisciplinariedad debe ser adoptada por algunos seres en cada epoca como metodo para aunar las diferentes doctrinas y que la sobre-especialización no acabe con la cohesión del mundo científico. Quizás es hora de que todos seamos un poco mas polímatas y nuestro sistema educativo motive el saber y no motive el incentivo del trabajo puesto que no es nada beneficioso para el espíritu de una cultura que haya 5 economistas o psicólogos por cada filósofo, aunque esto sirva para regular el mercado de trabajo, el titulo universitario no es solo un incentivo a la educación para el futuro próximo, es la antesala al bienestar y la autorrealización e implantando este tipo de cultura desde el mas profundo albor de la niñez se evitarian conflictos de intereses académicos al realizar un análisis de mercado como lo acontecido en el fraude bancario de apalancamiento de un 3300% en EEUU durante esta última recesión. ¿Que tan bienestar produce el dinero mas que el autoestima? ¿En que clase de mentalidad nos estamos zambullendo? y ¿Cual es el criterio a seguir en la criva social? preguntas para el futuro.

Que se formen sabios no profesionales y la educación reducira la conflictividad social aumentando la productividad y la eficiencia sin necesidad de ejercer tal presión moral sobre los alumnos y quizás en un futuro se acabe la sobrecualificación y los físicos ya no serán cajeros de mercadona, tendrán su lugar como intelectuales de la sociedad y cuando todo el sistema este automatizado tendremos nuestro único lugar como entes pensante, aumentando nuestra propia calificación como seres humanos. Porque es comprensible que no todo el mundo puede desarrollar la teoría de la relatividad en una oficina de patentes sin una vocación instalada como base de su bienestar.

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